PAGINA SIETE: El vicepresidente Álvaro García Linera afirmó ayer que ninguna autoridad de Gobierno “nunca” dio una orden para reprimir a los indígenas de la VIII marcha en defensa del TIPNIS, aunque en noviembre de 2011 dijo que conocía quién dio esta instrucción.
“Nunca, ni el Presidente ni el Vicepresidente ni el ministro de Gobierno dieron orden de intervención el día domingo (25 de septiembre de 2011) a las cuatro de la tarde, y peor se dio algún tipo de instrucción que tuviera referencia hacia el maltrato”.
Las declaraciones fueron realizadas en una conferencia de prensa en Santa Cruz en relación al cuestionario que le envió la Fiscalía para que responda por la represión en Chaparina.
“Nunca, ni el Presidente ni el Vicepresidente ni el ministro de Gobierno dieron orden de intervención el día domingo (25 de septiembre de 2011) a las cuatro de la tarde, y peor se dio algún tipo de instrucción que tuviera referencia hacia el maltrato”.
Las declaraciones fueron realizadas en una conferencia de prensa en Santa Cruz en relación al cuestionario que le envió la Fiscalía para que responda por la represión en Chaparina.
García Linera anticipó que sus respuestas “van a girar entorno a ese principio que hemos mantenido desde el primer día”.
El 29 de noviembre de 2011, un periodista preguntó a la autoridad quién dio la orden de intervención a la VIII marcha indígena. “Nosotros ya sabemos lo que ha sucedido, nosotros ya tenemos (el nombre), internamente hemos hecho un conjunto de averiguaciones, pero aguántese, no sea desesperado”, contestó.
Entonces también dijo que la orden no salió del Ejecutivo.
El 25 de septiembre de 2011, policías enviados por el Gobierno reprimieron violentamente a los indígenas que protagonizaron la VIII marcha para oponerse a la construcción de una carretera asfaltada por el medio del TIPNIS como quería el Ejecutivo.
La represión dejó más de 70 heridos graves y leves, algunos originarios fueron sometidos a tratos degradantes, maniatados y golpeados ferozmente, según el informe del defensor del Pueblo. La arremetida policial no logró frenar el avance de la caminata hacia la ciudad de La Paz.
Para el dirigente indígena Adolfo Chávez, las autoridades de Gobierno y de la Fiscalía están buscando la extinción de este caso porque la orden, como admitió el ex subcomandante de la Policía que dirigió el operativo Óscar Muñoz, fue impartida por el entonces ministro de Gobierno y ahora embajador de Bolivia ante la ONU, Sacha Llorenti.
“Esto compromete seriamente al Gobierno y eso no les conviene”, dijo el también líder de la CIDOB que no es afín al MAS.
Muñoz Colodro, durante la reconstrucción de la represión en Chaparina en enero pasado, dijo: “Me comuniqué con el viceministro (Marcos) Farfán y le dije que tenemos un incidente. Farfán entonces me dijo ‘espere un momento, me voy a comunicar y le devuelvo la llamada’, (') me devolvió la llamada y me dijo que proceda con el operativo”.
Las investigaciones por este caso están en manos de la Fiscalía y según los indígenas avanza lentamente. Asimismo, el Vicepresidente pidió a los administradores de justicia darle celeridad al proceso porque “un juicio que tarda ya lleva injusticia”, por lo que responderá con celeridad a la preguntas de la Fiscalía.
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