Desde el trabajo y la experiencia política de la RENAMAT se generó un espacio de reflexión colectiva en la cual se exponen las problemáticas ambientales del territorio aledaño de Llallagua, mencionando la inmensa cantidad de relaves mineros que siguen ocasionando problemas, además del poco tratamiento de lso residuos y generación de basura, se mencionó también la presencia contaminante de un matadero cerca de espacios escolares. Desde este escenario se trabajó el fortalecimiento de los derechos ambientales y colectivos, caracterizando la contaminación de fuentes de agua principalmente, así como la necesaria protección de las fuentes de agua potable.
Con dinámicas de confianza entre mujeres y a partir de la relación de afectos, se lograron compartir experiencias desde las vivencias encarnadas de las mujeres en la dimensión de los cuidados y como reproductoras de la vida. Como ejemplo emblemático se compartió la experiencia del Municipio de Challapata, sirvió para fortalecer la lucha contra la contaminación. Las hermanas de Llallagua reconocieron la importancia de la organización y de la articulación para seguir vinculadas en tejidos de solidaridad, conocimientos y saberes entre mujeres indígenas campesinas, regantes y pesqueras, todas defensoras de la Madre Tierra.
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