LA RAZÓN: Unas 17 comunidades que viven en las áreas
protegidas del Madidi y Pilón Lajas rechazan el proyecto hidroeléctrico
de El Bala porque los pone “en riesgo de desaparecer” y exigen una
consulta previa.
Según un voto resolutivo, esas
comunidades son Carmen Florida, Real Beni, San Miguel, San Antonio de
Sani, Embocada, Asunción del Quiquibey, Gredal, El Corte, San Luis
Chico, San Luis Grande, Torewa, Villa Arcilla Bolsón, Bisal, San
Bernardo, Charque y San José de Uchupiamonas.
El
Gobierno contrató a la empresa italiana Geodata por $us 22 millones para
realizar un estudio de viabilidad del proyecto. Se calcula,
preliminarmente, que la planta podría generar entre 1.600 y 4.000
megavatios de electricidad.
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