Red PioXII.- Según Urioste, el proyecto minero de
Amayapampa implica la construcción de una planta de explotación del oro
con una inversión de 35 millones de dólares para producir 100 mil onzas
anuales.
Siglo XX, Potosí 20 Diciembre 2012 (Radio PIO XII).- Rafael Urioste,
Gerente de Comunicación de la empresa minera Republic Gold en Bolivia,
señalo que el proyecto minero Amayapampa tiene muchos
avances en
exploración y está listo para ser explotado.
Dijo que Lion Gold compró la concesión el pasado 11 de Diciembre en la bolsa de Singapur, Malasia.
Según Urioste, el proyecto minero de Amayapampa implica la
construcción de una planta de explotación del oro con una inversión de
35 millones de dólares para producir 100 mil onzas anuales.
Aclaró que desde enero se aplicará un cronograma para construir una
planta de procesamiento del oro más pequeña de la que se había
proyectado.
No quiso precisar la fecha para el inicio de las operaciones.
Afirmó que la última palabra sobre el destino de la planilla de más
de 300 empleados que tiene la empresa saliente está en manos de la Lion
Gold.
La compañía extranjera Republic Gold, que en Bolivia es la empresa
minera Nueva Vista no pudo empezar operaciones debido a conflictos entre
comunidades que cuestionaban el proyecto minero.
La masacre del oro
En 1996 Amayapampa, en manos de Cemsa, paralizó operaciones. El
empresario Raúl Garafulic decidió vender el yacimiento a la Da Capo, de
allí pasó a manos de la Vista Gold y luego a la Nueva Vista,
posteriormente a otras empresas como la Republic Gold.
Amayapampa es la reserva de oro más grande de esta región, está
ubicada en el municipio de Chayanta, provincia Bustillo de Potosí.
En Diciembre de 1996 se produjo la masacre del oro por el control de las minas Capasirka y Amayapampa en el Norte Potosí.
Amparados en la ley minera de entonces, los empresarios que compraron
los yacimientos pidieron al Estado la intervención policial y militar.
Los comunarios organizados en el Consejo de Ayllus defendieron estos
recursos y denunciaron que fueron explotados, contaminados y se vieron
en la miseria, mientras otros como Garafulic se enriquecieron con el oro
de esta región.
El resultado de la intervención policial militar, ordenado por el
gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada fueron 9 muertos más de 50 heridos
y detenidos.
La necropsia o revisión de los cadáveres dio el siguiente informe:
los fallecidos tenían herida de bala 9 milímetros, algunos podían
salvarse, pero no recibieron atención médica oportuna.
Fue el inicio de los cambios en Bolivia.
Ningun militar, policía, empresario minero, ministro o presidente de entonces fueron enjuiciados. Todo quedó en la impunidad.
Los jueces superiores de Potosí, uno de ellos denunciando de
militancia movimientista, dieron 13 años de cárcel a dos dirigentes
mineros de Capasirka.
Por entonces se afirma que la producción mensual de Amayapampa era de más de 10 kilos de oro.
G.H.A.
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