Miércoles, 17 de abril de 2019
Ambientalistas refutaron las versiones que dio el ministro de Economía, Luis Arce en Washington, sobre el modelo de desarrollo en Bolivia. Advirtieron que contrariamente a lo que sostuvo, el país está sumido en un modelo extractivista depredador, irrespetuoso con la madre tierra, que conlleva el desplazamiento de pueblos indígenas de sus territorios.
El director de la Fundación Solón, Pablo Solón afirmó que los proyectos económicos que impulsa el Gobierno no solo que no tienen una rentabilidad asegurada, sino que en muchos casos no tienen estudios de evaluación de impacto ambiental (EEIA).
Citó como ejemplo de proyectos con grave impacto ambiental el de la producción del etanol y el biodiesel que provocarán una deforestación de más de 400 mil hectáreas o de las mega-hidroeléctricas del Chepete y Rositas que crearán el tercer y cuarto lago más grande de Bolivia.
"Ni en el caso del litio, que requieren ingentes cantidades de agua, ha habido un proceso transparente de evaluación de los impactos ambientales", señaló a ANF.
El también ex embajador de Bolivia ante la ONU durante el primero Gobierno de Evo Morales dijo que la Defensoría de la Madre Tierra creada en diciembre del 2010 por la ley 71 de Derechos de la Madre Tierra hasta ahora no ha sido implementada "porque el Gobierno no tiene voluntad de que los derechos de la naturaleza se garanticen por encima de su esquema de inversiones insostenibles".
El ministro de Economía y Finanzas, Luis Arce en una entrevista otorgada en Estados Unidos a la agencia AFP dijo que: "el crecimiento tiene que ser con respeto a la madre tierra, la madre tierra es la ecología".
Por su parte, el vocero de la Coordinadora Nacional de Pueblos Indígenas para la Defensa de los Territorios y Áreas Protegidas (Contiocap), Álex Villca dijo que los bolivianos escucharon este tipo de discursos durante 13 años, pero en "casa hemos visto que sucede todo lo contrario de lo que profesan fuera de nuestras fronteras".
El líder indígena aseguró que los grandes beneficiados de las políticas económicas neoliberales impulsadas por el Gobierno, solo han servido para beneficiar a los sectores más pudientes del país como las transnacionales, empresarios soyeros, banqueros, ganaderos y otros.
"Los sectores históricamente excluidos como los pueblos indígenas nos encontramos viviendo frente a una mayor crisis económica y social en nuestro país, el cual nos amenaza incluso con el despojo y exterminio de nuestros pueblos y comunidades", afirmó.
Villca, oriundo de la comunidad indígena San José de Uchupiamonas situado en el Parque Madidi señaló que hoy se vive en Bolivia es una profundización del modelo económico neoliberal, totalmente irrespetuoso de la madre tierra y de los pueblos indígenas.
Dijo que es importante hacer saber a la comunidad internacional que el modelo capitalista se ha profundizado en el Gobierno de Morales, y claro ejemplo de aquello son las más de 100 áreas petroleras en subasta, una veintena de mega-hidroeléctricas en fase de construcción y/o estudios, profundización de la explotación aurífera en la cuenca Amazónica, así como la ampliación de la frontera agrícola destinado a los biocombustibles.
El ministro Arce dijo que "los países que hemos emprendido el proceso de desarrollo ahora, es mucho más caro, porque tenemos que usar tecnologías que dañan mínimamente el medioambiente".
AFP apuntó que mientras el Fondo Monetario Internacional (FMI) pronostica un crecimiento para Bolivia de 4% en 2019, esta cifra contrasta con las previsiones para la región de una expansión de 1,4%.
Luis Arce participó junto a la ministra de Planificación Mariana Prado de las Reuniones de Primavera del Grupo del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional.
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