Bolivia siembra soya transgénica tolerante a herbicidas desde el año 2008 (cosechando más de 1.2 millones de hectáreas en 2016) e importa al menos 11 tipos de alimentos derivados de cultivos transgénicos, productos que llegan sobre todo de Estados Unidos y el Mercosur. Ahora sus agricultores exigen al gobierno la autorización para poder sembrar maíz, algodón y caña de azúcar transgénica que les ayude a controlar plagas y malezas y también tolerar mejor las sequías.
A pesar de que Bolivia por el momento solo siembra soya transgénica a nivel comercial, los pequeños, medianos y grandes productores de Santa Cruz (el mayor productor de alimentos de Bolivia) demandan que el Gobierno central autorice el uso de más productos derivados de los cultivos transgénicos cómo el maíz, algodón y caña de azúcar, resistentes a los efectos del cambio climático, las plagas y las malezas. Argumentan que esta medida mejoraría los rendimientos y los costos de producción.
[Recomendado: Agricultores bolivianos proponen uso de nuevos cultivos transgénicos al Gobierno para combatir plagas, sequía y malezas]
El presidente de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo Anapo), Marcelo Pantoja, sostiene que el sector productivo atraviesa una difícil situación por las pérdidas provocadas por lluvias e inundaciones, por lo que ameritan medidas. “Esperamos avanzar en los acuerdos de la agenda productiva establecida con el presidente Evo Morales en el acceso al uso de nuevos eventos biotecnológicos en soya, maíz, algodón y caña de azúcar, ya que es la única forma de brindar condiciones adecuadas para que los productores podamos invertir en la ampliación de la frontera agrícola”, sostiene.
A pesar de que Bolivia por el momento solo siembra soya transgénica a nivel comercial, los pequeños, medianos y grandes productores de Santa Cruz (el mayor productor de alimentos de Bolivia) demandan que el Gobierno central autorice el uso de más productos derivados de los cultivos transgénicos cómo el maíz, algodón y caña de azúcar, resistentes a los efectos del cambio climático, las plagas y las malezas. Argumentan que esta medida mejoraría los rendimientos y los costos de producción.
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El presidente de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo Anapo), Marcelo Pantoja, sostiene que el sector productivo atraviesa una difícil situación por las pérdidas provocadas por lluvias e inundaciones, por lo que ameritan medidas. “Esperamos avanzar en los acuerdos de la agenda productiva establecida con el presidente Evo Morales en el acceso al uso de nuevos eventos biotecnológicos en soya, maíz, algodón y caña de azúcar, ya que es la única forma de brindar condiciones adecuadas para que los productores podamos invertir en la ampliación de la frontera agrícola”, sostiene.
[Recomendado: Agricultores y científicos de Bolivia exigen al gobierno aprobar el uso de más cultivos transgénicos]
El artículo 255 de la CPE prohíbe la importación, producción y comercialización de OGM (organismo cuyo material genético fue alterado con técnicas de ingeniería, mediante transgénesis o cisgénesis, es decir, la inserción de uno o varios genes. Incluyen microorganismos, como bacterias o levaduras). A pesar de esta normativa, Pantoja indica que Bolivia importa maíz transgénico sin autorización, principalmente de Argentina.
En tanto, el gerente del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Gary Rodríguez, explica que para identificar los alimentos que importa Bolivia se debe identificar el origen de los mismos. “Principalmente Estados Unidos y los países del Mercosur cómo lo son Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay, de dónde provienen materias primas cómo la soya, maíz y canola transgénica”, explica.
[Recomendado: Bolivia ganaría US$150 millones extras al año con nuevas variedades de maíz y soya transgénica]
Los transgénicos en la canasta familiar de los bolivianos
Son cuatro los principales cultivos de transgénicos que hacen parte de los productos básicos de los bolivianos: soya, maíz, algodón y canola. De ellos se derivan productos cómo aceites y margarinas, alimentos para mascotas, bebidas a base de soya, leche saborizada, cereales, chocolates y dulces que contengan lecitina, panes y galletas, carnes preparadas y sopas instantáneas.
A su turno, el director de Productividad Biosfera y Medio Ambiente (Probioma), Miguel Ángel Crespo señala que estos alimentos derivados de los cultivos transgénicos que ingresan al país vienen en su mayoría desde Argentina y Brasil y son ofrecidos en los supermercados bolivianos.
[Recomendado: Debido a sequía y plagas, los agricultores bolivianos exigen uso de cultivos transgénicos]
Por su parte, el gerente del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Gary Rodríguez, desestima las consecuencias de los transgénicos para la salud. “Quiero aclarar que en 22 años de consumo de alimentos transgénicos no ha habido un solo caso de muerte documentado a nivel mundial o de un daño severo a la salud”, dice Rodríguez.
Según el IBCE, el principal productor de alimentos transgénicos del mundo es Estados Unidos, seguido de Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay. “Cabalmente son socios comerciales importantes de Bolivia y los productos que he enunciado, si tienen origen en esos países casi con toda seguridad que deberán ser a partir de semillas genéticamente mejoradas”, afirma Rodríguez.
[Recomendado: Bolivia podría duplicar su producción si utilizara maíz transgénico]
Según datos del INE, Argentina fue el principal país desde el cual se importaron alimentos en 2017 con un volumen de 634 millones de kilos. En el mismo periodo se importaron 6 millones de kilos de alimentos de Estados Unidos, 35 millones de Brasil, 13 millones de Paraguay y 1,6 millones de Uruguay.
Crean 42 variedades de soya transgénica
El gerente técnico de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), Richard Trujillo, explica que se presentaron 12 nuevas variedades de semillas de soya resistentes a plagas y factores climáticos que fueron desarrolladas en ocho meses de trabajo. Asimismo, Trujillo precisa que en los últimos cuatro años se lanzaron 42 nuevas variedades comerciales de soya.
Los investigadores de Interagro, Don Mario, Fundacruz, Anapo Lealsem, Marín Semillas y Zentta Seeds fueron los que generaron las 12 variedades nuevas.
Mientras tanto, el director de el Centro de Investigación Agrícola Tropical de Santa Cruz, Luis Hurtado, indica que Bolivia es el único país de Sudamérica que no produce alimentos transgénicos más allá de la soya. Al respecto, concluye que la autorización beneficiaría a los productores y generaría mayores investigaciones.
El artículo 255 de la CPE prohíbe la importación, producción y comercialización de OGM (organismo cuyo material genético fue alterado con técnicas de ingeniería, mediante transgénesis o cisgénesis, es decir, la inserción de uno o varios genes. Incluyen microorganismos, como bacterias o levaduras). A pesar de esta normativa, Pantoja indica que Bolivia importa maíz transgénico sin autorización, principalmente de Argentina.
En tanto, el gerente del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Gary Rodríguez, explica que para identificar los alimentos que importa Bolivia se debe identificar el origen de los mismos. “Principalmente Estados Unidos y los países del Mercosur cómo lo son Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay, de dónde provienen materias primas cómo la soya, maíz y canola transgénica”, explica.
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Los transgénicos en la canasta familiar de los bolivianos
Son cuatro los principales cultivos de transgénicos que hacen parte de los productos básicos de los bolivianos: soya, maíz, algodón y canola. De ellos se derivan productos cómo aceites y margarinas, alimentos para mascotas, bebidas a base de soya, leche saborizada, cereales, chocolates y dulces que contengan lecitina, panes y galletas, carnes preparadas y sopas instantáneas.
A su turno, el director de Productividad Biosfera y Medio Ambiente (Probioma), Miguel Ángel Crespo señala que estos alimentos derivados de los cultivos transgénicos que ingresan al país vienen en su mayoría desde Argentina y Brasil y son ofrecidos en los supermercados bolivianos.
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Por su parte, el gerente del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Gary Rodríguez, desestima las consecuencias de los transgénicos para la salud. “Quiero aclarar que en 22 años de consumo de alimentos transgénicos no ha habido un solo caso de muerte documentado a nivel mundial o de un daño severo a la salud”, dice Rodríguez.
Según el IBCE, el principal productor de alimentos transgénicos del mundo es Estados Unidos, seguido de Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay. “Cabalmente son socios comerciales importantes de Bolivia y los productos que he enunciado, si tienen origen en esos países casi con toda seguridad que deberán ser a partir de semillas genéticamente mejoradas”, afirma Rodríguez.
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Según datos del INE, Argentina fue el principal país desde el cual se importaron alimentos en 2017 con un volumen de 634 millones de kilos. En el mismo periodo se importaron 6 millones de kilos de alimentos de Estados Unidos, 35 millones de Brasil, 13 millones de Paraguay y 1,6 millones de Uruguay.
Crean 42 variedades de soya transgénica
El gerente técnico de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), Richard Trujillo, explica que se presentaron 12 nuevas variedades de semillas de soya resistentes a plagas y factores climáticos que fueron desarrolladas en ocho meses de trabajo. Asimismo, Trujillo precisa que en los últimos cuatro años se lanzaron 42 nuevas variedades comerciales de soya.
Los investigadores de Interagro, Don Mario, Fundacruz, Anapo Lealsem, Marín Semillas y Zentta Seeds fueron los que generaron las 12 variedades nuevas.
Mientras tanto, el director de el Centro de Investigación Agrícola Tropical de Santa Cruz, Luis Hurtado, indica que Bolivia es el único país de Sudamérica que no produce alimentos transgénicos más allá de la soya. Al respecto, concluye que la autorización beneficiaría a los productores y generaría mayores investigaciones.
Testimonios
“Todos los alimentos importados de Argentina y Brasil tienen lencitina y son transgénicos, están en los supermercados”. Miguel Crespo. Director Probioma.
“Este debate entre alimentos transgénicos versus orgánicos es falso porque pueden coexistir por zonificación”. Gary Rodríguez. Gerente IBCE.
“El agricultor tiene que contar con alternativas, y creemos que la alternativa es liberar los OGMs para nuestro país”. Luis Paz. Director CIAT.
•Fuentes: http://www.agrobio.org/actualidad/bolivia-importa-al-menos-11-tipos-alimentos-derivados-transgenicos/ | http://www.laprensa.com.bo/economia/20180320/bolivia-importa-al-menos-11-tipos-alimentos-derivados-transgénicos
“Todos los alimentos importados de Argentina y Brasil tienen lencitina y son transgénicos, están en los supermercados”. Miguel Crespo. Director Probioma.
“Este debate entre alimentos transgénicos versus orgánicos es falso porque pueden coexistir por zonificación”. Gary Rodríguez. Gerente IBCE.
“El agricultor tiene que contar con alternativas, y creemos que la alternativa es liberar los OGMs para nuestro país”. Luis Paz. Director CIAT.
•Fuentes: http://www.agrobio.org/actualidad/bolivia-importa-al-menos-11-tipos-alimentos-derivados-transgenicos/ | http://www.laprensa.com.bo/economia/20180320/bolivia-importa-al-menos-11-tipos-alimentos-derivados-transgénicos
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