miércoles, 16 de julio de 2014

PILCOMAYO: PARAGUAY Y ARGENTINA PIDEN INFORME DE CONTAMINACIÓN

CORREO DEL SUR: El derrame de desechos tóxicos de la empresa minera Apóstol Santiago en aguas que desembocan en el río Pilcomayo provovó que la Cancillería de Paraguay y el diputado nacional argentino Alberto Asseff pidan informes sobre la situación ambiental de la corriente; mientras tanto, el gobernador de Chuquisaca Esteban Urquizu ratificó que emprenderá acciones legales contra los autores y una comisión mixta se traslada hoy al lugar de los hechos.
La Cancillería paraguaya solicitó a su Embajada en La Paz un informe al respecto y analiza enviar un equipo técnico de la Comisión Trinacional del Río Pilcomayo para evaluar los daños, según el periódico ABC Color.
Asimismo, Asseff pidió ayer al Ministerio de Relaciones Exteriores argentino
 que informe ante la Cámara de Diputados sobre los daños que pueden causar el vertido tóxico en las aguas del Pilcomayo.
En su fundamentación, el legislador hace referencia a las declaraciones del fiscal de la provincia Cornelio Saavedra, José Luis Ríos, recogidas por ERBOL. En las mismas, el representante del Ministerio Público advierte que el derrame puede causar daños irreversibles y pidió a la población no consumir el agua contaminada.
En este sentido, la Gobernación de Chuquisaca reveló un estudio de laboratorio que constató la presencia excesiva de turbiedad, sodio, manganeso, hierro y cromo en el río Pilcomayo, además un alto nivel de acidez, tras la prueba del PH.
De acuerdo con la publicación de ABC Color, la Comisión Trinacional se reunirá la siguiente semana en Argentina y abordará este tema.


ACCIONES LEGALES
La Gobernación de Chuquisaca quiere sentar precedente sobre este hecho y ratificó que iniciará acciones legales en contra de los autores, entre ellos, la empresa minera Santiago Apóstol, directamente involucrada por el último derrame.
“Tenemos la obligación de presentar los procesos, porque Chuquisaca es víctima de la contaminación y no podemos seguir. Todas las empresas o cooperativas mineras que trabajan en el departamento de Potosí no pueden seguir con ese tipo de contaminación, es un daño al medioambiente, a la producción, a nuestros hermanos de la ribera del Pilcomayo”, manifestó el gobernador de Chuquisaca Esteban Urquizu.
La contaminación estaría afectando directamente a 26 comunidades de nueve municipios de Chuquisaca y también a otras comunidades de los departamentos de Potosí y Tarija, incluso en Paraguay y Argentina, según la Gobernación.


COMISIÓN MIXTA
Una comisión mixta de Chuquisaca conformada por el Defensor del Pueblo, la Gobernación, la Brigada Parlamentaria, la Asamblea Departamental y el Ministerio Público, entre otros, se trasladan hoy, hasta la comunidad de Canutillo, del municipio de Tacobamba, Potosí, donde se produjo el derrame de desechos tóxicos el pasado 4 de julio.
“Nos vamos a trasladar hasta el lugar del dique para evaluar, ver cómo ha sucedido y también hemos convocado a que se pueda hacer presente la Gobernación de Potosí, como también el Ministerio de Minería y el Ministerio de Medio Ambiente”, informó el secretario de Medio Ambiente y Madre Tierra de la Gobernación de Chuquisaca, Eddy Carvajal.
También informó que se conformaron brigadas de salud que visitarán cada una de las 26 comunidades para ver posibles efectos de la contaminación.
Por otro lado, señaló que entre el 20 y 24 de este mes, los delegados de la Comisión Trinacional se reunirán en La Paz para evaluar el problema del río Pilcomayo.
“También se ha confirmado que el 28 de este mes vamos a trasladarnos a la ciudad de Formosa de Argentina tanto la Cancillería, el Ministerio de Medio Ambiente y la Gobernación de Chuquisaca, ya directamente el traslado de los servidores, los equipos y también el personal de Argentina y Paraguay; entonces desde agosto estaríamos empezando con la plenitud del trabajo”, manifestó Carvajal.
Contaminación
El pasado 4 de julio, el dique de colas de la empresa Santiago Apóstol colapsó; consecuentemente, derramó lama en unos cinco kilómetros y el agua llegó al Pilcomayo.

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