LA PATRIA: Alrededor de 200 marchistas entre niños, mujeres y ancianos continúan con la movilización rumbo a la ciudad de La Paz, en demanda de la aprobación de una ley para proteger al lago Poopó y el fortalecimiento de las comunidades urus, pero su principal obstáculo en el camino es la falta de alimento y el estado del tiempo que afectó la salud de los indígenas.
Anoche pernoctaron en Patacamaya y tienen previsto llegar el miércoles a la ciudad de La Paz.
La marcha está encabezada por las autoridades de las comunidades Urus de Llapallani y Vilañique. Andrés Choque presidente de la marcha, expresó su malestar por la falta de asistencia de las autoridades de Oruro, pues ellos requieren de bastante apoyo en salud y alimentos.
Anoche pernoctaron en Patacamaya y tienen previsto llegar el miércoles a la ciudad de La Paz.
La marcha está encabezada por las autoridades de las comunidades Urus de Llapallani y Vilañique. Andrés Choque presidente de la marcha, expresó su malestar por la falta de asistencia de las autoridades de Oruro, pues ellos requieren de bastante apoyo en salud y alimentos.
"Estamos tropezando con las consecuencias del tiempo y la alimentación, también el resfrío de los niños y bebecitos que están cargados por sus mamás, lamento que las autoridades del departamento no nos apoyen, hasta el momento estamos yendo a nuestra cuenta propia, haciéndonos una vaquita", informó el representante de los indígenas originarios.
Ellos por primera vez están marchando a la ciudad de La Paz. "Estamos un poco sufriendo de ampollas, calambres en los pies, sobre todo las mujeres, niños y ancianos que están sufriendo. Tenemos mucha pena de que se enfermen", dijo.
Todavía no hay un acercamiento con autoridades nacionales, pese que han recibido llamadas telefónicas para entablar el diálogo. Indican que ellos están predispuestos a dialogar y esperan que las autoridades arriben a la marcha para escuchar sus demandas y buscar soluciones.
Los marchista esperan el apoyo y la solidaridad del pueblo boliviano, indicaron que sus demandas son justas y como pueblo siempre han sido olvidados y discriminados por todos los gobiernos de turno, es por ello que ahora se movilizan para ser escuchados y exigir políticas para proteger el lago Poopó y fortalecer a las comunidades Urus.
"Queremos ser respetados, protegidos por una ley, hasta ahora hemos sido humillados, discriminados por nuestros vecinos", explicó el dirigente.
La marcha continúa a pesar de las condiciones climatológicas negativas, y se temen algunas bajas por el estado de salud, principalmente de los ancianos.
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